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ToggleEl creciente consumo de drogas y sustancias psicoactivas representa un desafío más para la seguridad vial, poniendo en riesgo no solo a quienes deciden conducir bajo su influencia, sino también a todos los usuarios de las vialidades.
De acuerdo Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco 2016-2017, en relación al consumo de cualquier droga, de drogas ilegales y de drogas médicas alguna vez en la vida, en la población de 12 a 65 años de edad, existe un incremento entre el 2008, 2011 y 2016, al pasar en el caso de cualquier droga de 5.7%, a 7.2% y 10.3% respectivamente; y en el caso de drogas ilegales de 5.2% a 7.2% y 9.9% respectivamente, siendo un incremento considerable para ambas en 2016.
En el caso de las drogas médicas, existe un incremento entre 2008 y 2011, al pasar de 1% al 1.4% y una leve disminución en 2016, al registrarse con 1.3% (Centros de Integración Juvenil A.C)
Cada vez que un conductor elige ponerse detrás del volante mientras está bajo la influencia de sustancias que alteran la mente, está tomando una decisión que podría tener consecuencias fatales, aunque es fundamental realizar mayor investigación al respecto a sus efectos: Varios estudios indican que el consumo de drogas deteriora significativamente las habilidades necesarias para una conducción segura. Varios estudios han demostrado que los conductores con THC en la sangre (delta-9-tetrahidrocannabinol —THC, el ingrediente en la marihuana que altera la mente) tenían aproximadamente el doble de probabilidades de causar un accidente fatal o morir en un accidente de auto que quienes no habían consumido drogas ni alcohol.
No obstante lo anterior, un amplio estudio de la NHTSA con un control de datos según la presencia de alcohol y la edad, el sexo y la raza del conductor, no halló ningún aumento significativo en el riesgo de siniestros de tránsito atribuible a la marihuana. (National Institute on Drug Abuse. Advancing Addiction Science)
De acuerdo con la OPS, los usuarios de la vía pública alcoholizados están expuestos a un riesgo considerablemente alto de verse involucrados en un accidente.
Estudios efectuados en países de ingresos bajos y medianos revelaron la presencia de alcohol en la sangre de entre 4% y 69% de los conductores, entre 18% y 90% de los peatones y entre 10% y 28% de los motociclistas lesionados en accidentes de tránsito. (International Center for Alcohol Policies).
En este blog abordamos cómo diferentes drogas y sustancias psicoactivas afectan la capacidad de conducción, con la finalidad de fomentar una mayor conciencia sobre la importancia de tomar decisiones responsables respecto a la conducción y el consumo de drogas.
Las drogas y sus efectos en la capacidad de conducir
Para entender cuáles son los efectos de las drogas en la capacidad de conducir, es conveniente iniciar explicando de manera breve cómo se clasifican las drogas y los efectos que estos generan.
Las drogas psicoactivas son sustancias que, al ser consumidas, alteran la percepción, el ánimo o el comportamiento de una persona. Para fines de análisis en el contexto de la conducción, estas se clasifican según su efecto primario en el sistema nervioso central (SNC):
- Estimulantes: Incrementan la actividad del SNC, resultando en mayor alerta, excitación, y energía. Ejemplos comunes incluyen la cocaína, las anfetaminas y la metanfetamina. Los estimulantes actúan incrementando la liberación de neurotransmisores como la dopamina y la norepinefrina, resultando en un aumento temporal de energía, atención, y autoconfianza. Sin embargo, pueden conducir a comportamientos arriesgados, sobreestimación de habilidades de conducción, y disminución de la capacidad para evaluar situaciones de manera crítica.
- Depresores: Reducen la actividad del SNC, disminuyendo la alerta y la coordinación, y enlenteciendo las funciones corporales. El alcohol, las benzodiacepinas y los barbitúricos son ejemplos típicos. Este tipo de estupefacientes afectan al cerebro al aumentar la actividad del GABA, un neurotransmisor que produce efectos sedantes. Esto conduce a una disminución en la coordinación motora, tiempo de reacción y habilidad para tomar decisiones rápidas y precisas, componentes críticos para una conducción segura.
- Alucinógenos: Alteran la percepción y pueden causar alucinaciones, distorsiones de la realidad, y cambios emocionales significativos. LSD, psilocibina (hongos mágicos) y MDMA (éxtasis) son sustancias dentro de esta categoría. Interfieren con la serotonina, un neurotransmisor involucrado en el control del ánimo y la percepción. El consumo de alucinógenos puede llevar a distorsiones perceptuales graves, pérdida del sentido de dirección y tiempo, lo cual es extremadamente peligroso al conducir.
¿Por qué es peligroso conducir bajo el efecto de las drogas?
Conducir bajo el efecto de las drogas significa manejar un vehículo cuando las capacidades se encuentran disminuidas por los efectos embriagadores.
Los efectos que cada droga son diferentes. Por ejemplo, la marihuana puede disminuir la coordinación, el tiempo de reacción y la capacidad para evaluar tiempo y distancia. Los conductores que han consumido cocaína o metanfetamina pueden conducir en forma agresiva o imprudente.
Ciertos tipos de medicamentos recetados —incluidos los opioides y las benzodiacepinas— pueden causar mareos y aletargamiento y disminuir el funcionamiento de las capacidades cognitivas (capacidad de juicio y capacidad de pensar). Todas estas deficiencias pueden causar siniestros viales.
Investigaciones han demostrado que la marihuana tiene efectos negativos en los conductores, entre ellos poca velocidad de reacción, un mayor zigzagueo entre carriles y falta de atención en la carretera. La combinación de alcohol con marihuana hace que la capacidad del conductor disminuya aún más y se aparte de su carril con mayor frecuencia.
Otros estudios indican que los opioides pueden causar aletargamiento o somnolencia y disminuir la capacidad de juicio y la habilidad para pensar y que conducir bajo el efecto de opioides puede duplicar las probabilidades de sufrir un accidente.
¿Cuál es la población más afectada por la conducción bajo el efecto de drogas?
Los grupos más afectados son los adolescentes y los adultos mayores. Los adolescentes tienen menos experiencia y son más propensos que otros conductores a subestimar o no reconocer las situaciones de peligro.
También es más probable que conduzcan a velocidad excesiva y mantengan menos distancia con los otros vehículos. Cuando la falta de experiencia para conducir se combina con el consumo de drogas, los resultados pueden ser trágicos.
Por otra parte, el deterioro mental en los adultos mayores puede llevar a que tomen medicamentos recetados con mayor o menor frecuencia de lo necesario o en la cantidad incorrecta.
También es posible que los adultos mayores no metabolicen el medicamento con tanta rapidez como las personas más jóvenes. Estos factores pueden causar un embriagamiento involuntario mientras conducen un vehículo.
¿Cuáles son las drogas que comúnmente se encuentran en las personas que conducen drogadas?
Después del alcohol, la marihuana es la droga que se encuentra con mayor frecuencia en la sangre de conductores que han sufrido un siniestro de tránsito. De igual forma, el riesgo de una colisión o volcadura asociada con la combinación de marihuana con alcohol, cocaína o benzodiacepinas parece ser mayor que el riesgo de cada droga por separado. Junto con la marihuana, los medicamentos recetados también están comúnmente asociados con accidentes causados por conductores drogados.
Una encuesta de estudiantes universitarios que tenían acceso a un automóvil reveló que uno de cada seis había conducido bajo los efectos de alguna droga (distinta del alcohol) al menos una vez el año anterior a la encuesta. La marihuana fue la droga más común, seguida por la cocaína y los analgésicos recetados.
El deterioro mental en los adultos mayores puede llevar a que tomen medicamentos recetados con mayor o menor frecuencia de lo necesario o en la cantidad incorrecta.
También es posible que los adultos mayores no metabolicen el medicamento con tanta rapidez como las personas más jóvenes. Estos factores pueden causar un embriagamiento involuntario mientras conducen un vehículo.
¿Con qué frecuencia ocurren accidentes debido a que el conductor está drogado?
Es difícil medir cuántos accidentes se producen a causa de un conductor drogado. Esto se debe principalmente a que:
- Todavía no existe una buena prueba que permita medir en la carretera los niveles de drogas en el organismo del conductor.
- Algunas drogas pueden permanecer en el organismo durante días o semanas después del consumo, lo que hace difícil determinar en qué momento se realizó el consumo y, por lo tanto, cómo y en qué medida el consumo disminuyó la capacidad de conducir.
- Por lo general, si el conductor presenta un nivel ilegal de alcohol en la sangre (alcohol en sangre no puede ser superior a 0.8 gramos por litro y en aire espirado a 0.4 miligramos por litro), la policía no busca la presencia de drogas en el organismo porque ya tiene suficientes pruebas para presentar un cargo por conducción bajo el efecto uso de sustancias.
- Muchos conductores que causan siniestros de tránsito tienen drogas y alcohol en el organismo, o tienen más de una droga, lo que hace difícil determinar qué sustancia ha tenido mayor efecto.
La seguridad vial comienza con el reconocimiento de nuestras responsabilidades como conductores y la comprensión de que nuestras decisiones tienen el poder de cambiar vidas, incluida la nuestra. Seguridad Vial somos Todos. Infórmate y actúa.
Efectos del alcohol y otras drogas en la conducción